La respiración oral y la salud de nuestros dientes y encías
La respiración fisiológica del ser humano es nasal.
Que la función de la nariz es respirar y la de la boca comer y hablar es algo obvio para todo el mundo, pero sin embargo, cada vez es más común encontrar pacientes que respiran por la boca.
¿Por qué hay que respirar por la nariz?
Al respirar por la nariz el aire se filtra de partículas, se calienta y cuando sale por la nariz también se calienta, humedeciendo así la nariz.
Cuando en lugar de respirar por la nariz, respiramos por la boca, el aire sin filtrar pasa directamente a la garganta. Aquí se encuentran las amígdalas y adenoides, que pasan a convertirse en la primera barrera de defensa, causando su inflamación.
Al inflamarse, el espacio de las vías aéreas se va a ver reducido, forzándonos de esta manera a continuar respirando por la boca y adquirir también una incorrecta postura corporal ya que los pacientes se ven obligados a levantar la cabeza para poder respirar curvando el cuello en exceso. Esto no solo nos concierne a los odontólogos por la repercusión que tiene en nuestros dientes y encías, también por cómo afecta al desarrollo de nuestro maxilar y mandíbula. (De esto hablaremos en el siguiente artículo “La respiración oral y el desarrollo craneo facial en niños”).
¿Cómo afecta la respiración oral a la salud de nuestros dientes y encías?
Pues bien, al respirar por la boca, se reduce mucho la producción de saliva y la boca se seca. Y… ¿Cuál es el problema? El problema es, que la saliva tiene una función MUY importante, proteger nuestros dientes.
Sí, la saliva tiene muchas funciones de las que ya hemos hablado en nuestro artículo “Xilitol y flúor para prevenir la caries”, entre otras tiene poder anticariogénico (previene la formación de caries) manteniendo un PH adecuado.
Al respirar por la boca y no producir suficiente saliva, el PH de nuestra boca se va a ver alterado, aumentando así el riesgo de caries y problemas de encías. La saliva que tiene el poder de mantener un PH constante, neutraliza el PH aportando iones calcio y fosfato a nuestros dientes ayudando a su remineralización.
Respirar por la nariz es un factor muy importante para mantener una buena salud bucal y general. Por lo que es de gran importancia tratar cualquier patología que esté obstruyendo tus vías aéreas, tu boca te lo agradecerá.