Las bebidas energéticas aumentan el riesgo de padecer caries
Las bebidas isotónicas son un tipo de bebidas con un alto contenido en azúcares y un bajo nivel de pH, que tienen por objetivo facilitar la rehidratación del organismo tras la realización de un ejercicio físico intenso. También son conocidas como bebidas ‘deportivas’ o ‘rehidratantes’.
En cambio, muchas personas las consumen de forma habitual, como si se tratara de un refresco, debido a su sabor dulce, y no porque hayan practicado algún deporte o necesiten rehidratarse. Este hábito repercute en nuestra salud, incrementando el riesgo de sufrir caries, erosión del esmalte y ocasionando obesidad, sobre todo en los niños.
Según un estudio realizado por la Facultad de Odontología de la Universidad de Cardiff (Reino Unido), las bebidas isotónicas son muy consumidas sobre todo en menores de entre 12 y 14 años. El estudio se realizó en 160 niños galeses que respondieron a un cuestionario. Según los resultados el 68% de los niños las consumían entre 1 y 7 veces a la semana, confesando que las consumían sobre todo en sus reuniones sociales por su sabor dulce y en algunos casos por su bajo coste.
Los padres permiten este consumo abusivo porque desconocen sus efectos sobre la salud bucodental de sus hijos.
Maria Z. Morgan, directora de esta investigación, explica que el propósito de este tipo de bebidas no ha sido bien comprendido y alerta del riesgo de padecer caries por su alto contenido en azúcar.
Según indica Peter D. Jackson, presidente de la Facultad de Medicina del Deporte, el agua o la leche es suficiente para que los niños estén hidratados tras el ejercicio, siendo totalmente innecesario el consumo de bebidas isotónicas para ellos y para la mayoría de los adultos. Este tipo de bebidas están dirigidas a atletas que realizan un ejercicio intenso, pero esto no les excluye de padecer caries también, por lo que es fundamental que se sometan a controles periódicos por su odontólogo.